Blogia
hilando recuerdos

Página 9

Página 9

Carta de amor que un abuelo de las colonias le escribió a su amor imposible

 La despedida

 

Este será para mí el día más triste de mi vida. Tener que separarme de ti será el motivo de mi nostalgia… pero hemos de decirnos adiós, porque lo nuestro no debe continuar. Este será el día más doloroso después de tu partida, porque con ella te llevarás la mitad de mi corazón y de mi vida. Será el día más largo de mi existencia, puesto que en las horas restantes mi mente se dedicará a recordarte sucesivamente y mi boca a pronunciar tu nombre. Y lo harán en cada hora, en cada segundo de cada día.
            Serán mis primeros días oscuros, porque la luz de tu sonrisa se alejará de mí. Mis ojos brillarán con melancolía, ansiosos de ver tu rostro hermoso.

Mi voz gritará con inalcanzable cansancio tu nombre. Pediré a fuertes voces tu presencia, tu mirada. Sé que lloraré por indefinidos momentos. Y le diré a los roces de mi almohada lo mucho que te extraño y cuanto te amo. Pero ni ella y mucho menos tú me podrán escuchar, ni responder. Me quedaré ahogándome en mi llanto y tú no podrás estar ahí para consolar mi pena.

¿Por qué tenemos que decirnos adiós? ¿Por qué las cosas con un principio tienen un final? ¿Por qué cuando uno ama no se le puede amar? No lo sé y tal vez no lo sabré jamás. Lo único que puedo asegurarte, mi amor, es que hoy, precisamente hoy, será el día más triste, largo y doloroso de mi vida y que, a pesar de todo, lo más hermoso es que siempre te amaré.

 Historia real acontecida en las colonias de antaño, contada a partir de un relato de Neyra Castillón.

-------------------------------------------------------

Desde el alma III

 Dime cómo te olvido

 Por Angel R. Anaya Puerta

 ¿Cómo te olvido mi amor, cómo te olvido,
si tu aroma en mi piel quedó impregnado?
¿Cómo te olvido, si aún estoy enamorado?
¿Cómo te olvido mi amor si solo estoy en
nuestro nido?

Tu recuerdo es como mi sombra.
Las huellas de los años, que triste se van.
Los amores que por mi camino se cruzaron
ya sus labios ni siquiera me nombran.

Hoy que ya nada me asombra,
de las penas y errores del pasado,
hoy ya no soy ese loco enamorado.
¿Cómo te olvido mi amor
si tus recuerdos todavía están en mi memoria?

0 comentarios